Editorial

La semana estuvo marcada por el fallecimiento de Hugo Chávez, sin embargo, lo que llamo intensamente la atención fue el dolor que esto provoco en sus ciudadanos, es impactante ver las imágenes de los ciudadanos llorando, la declaración de 7 días de luto nacional. Sin embargo, lo más sorprendente es ver la dualidad de paciones que levanta la figura de Hugo Chávez, por un lado un pueblo que lamenta profundamente su perdida y por el otro lado, otra parte de la ciudadanía que si bien, no goza de su muerte sí está interesado en que su fallecimiento sea el parte aguas que marque otro camino a seguir en el crecimiento económico de Venezuela. Aquí en nuestro país el presidente Enrique Peña Nieto, acudió al funeral de Hugo Chávez, lo cual es interesante debido al papel que México está buscando jugar en el escenario internacional característico del PRI, y todo pudo haber sido muy aplaudible si no fuera porque se dice se quedo dormido. Aunque en los videos no se puede apreciar que realmente este dormido ó bien simplemente cansado.